1.4.08

REY EN UN MUNDO DE AGUAS
(Una versión resumida se publicó en Cuba Internacional, Año XLV, No. 352, páginas 38-39, 2005)

Dura es la Ciénaga, y bella. Mundo de aguas deslumbrante, catálogo inconcluso de leyendas. Llana península de manglares y cortaderas bajo la errática jerarquía de las mareas. Cierran las aguas el paso y las plagas de insectos lancean la piel ardida de sol o aterida por la humedad y el frío nocturno. Pero entra el hombre y el animal se esconde, tiembla el vegetal. Lanza, machete, red, fuego, disparo de escopeta: enseñan.

Ahora, con una gota más de sabiduría, comienza el humano a proteger. Decir Ciénaga de Zapata es nombrar un territorio singular cuyas 628 171 hectáreas guardan especies de aves, reptiles y peces con frecuencia irrepetibles. En pocos años, la categoría de Reserva de la Biosfera y su reconocimiento como Sitio Ramsar y Parque Nacional han puesto al alcance de los ecólogos la importancia de este humedal cubano, el mayor y mejor conservado del Caribe insular.

El medio acuático es el centro de los incontables valores de la región. Entre los empeños para protegerlo se encuentra una pequeña estación hidrobiológica que por unos tres lustros ha sido como vigía de un complejo acuático en el que sobresalen la Laguna del Tesoro y el río Hatiguanico, más un sistema ingeniero de canales, zanjas abiertas casi a mano limpia por carboneros y leñadores, e incontables lagunas menores, arroyos, ojos de agua, pantanos donde el estallido níveo de la flor acuática deslumbra cada dia solo para el ojo del caimán y la garza.

EL HOGAR DE UNA RELIQUIA BIOLOGICA
Cuenta un mito indocubano que habitaba un rey las aguas de la ciénaga, que aleccionó a sus súbditos para que se alejaran de las orillas donde moraba el hombre. Era el Manjuarí, de afilada mordida, piel blindada y cuerpo macizo, más antiguo que la herencia de cualquier otro ser vivo presente por allí. Este fósil viviente, sin embargo, no seguiría habitando mucho tiempo más sus sombreados remansos si no se le ayuda.

El manjuarí -científicamente Atractosteus tristoechus- es una reliquia biológica endémica de Cuba, que solamente habita al sur de las provincias occidentales y tiene en la Ciénaga uno de sus reservorios más importantes. Aparte de la desventaja que ya representa su limitado hábitat, en los últimos años esta especie ha sido explotada por pescadores furtivos e impactada por el laboreo extractivo de la acuicultura de especies foráneas introducidas en acuatorios naturales.

El vigente Reglamento de Pesca incluye al manjuarí en un grupo de especies cuya captura sin autorización gubernamental puede ser fuertemente multada. Lo curioso es que en el documento legal se caracteriza al pez dulceacuícola como "especie destinada exclusivamente para la pesca comercial" y no como "amenazada o en peligro de extinción" (Decreto-ley 164 de 1996, capítulo VII), que parece ser la situación de este pez.

La Estación Hidrobiológica, donde intentan hallar alternativas para la supervivencia del medio acuático cienaguero, se llamó muchos por años el Centro de Repoblación de la Ictiofauna Fluvial, Aunque el nuevo nombre indica una más amplia estrategia, todavía su función más relevante es criar al manjuarí para devolverle sus predios. En ello trabaja una decena de hombres dirigidos por el licenciado Andrés Hurtado.

-Desde 1989 nos hemos dedicado a conocer la biología de estos peces -dice-, a estudiar el tratamiento de sus principales enfermedades, la alimentación, a dominar la tecnología de la reproducción, que es tan importante para nuestros fines.

Uno de los problemas que presenta la cría de depredadores como el manjuarí es que tales animales se alimentan preferentemente de alimento vivo. Para nutrir las crías de manjuarí en las primeras etapas de vida originalmente empleaban unos organismos microscópicos llamados artemia, pero su precio resultó a la postre demasiado elevado y hubo que buscar una alternativa.

-Entonces pasamos un entrenamiento para el cultivo de alimento vivo en Mampostón, donde conocimos que el Ministerio de la Pesca tenía un trabajo muy bueno en el cultivo de un crustáceo llamado moina. Fuimos allá, nos dieron la tecnología y resolvimos el problema del alimento de los ejemplares. Hemos ganado una buena batalla para el trabajo de la ictiofauna cubana porque todo lo que tenemos, los guajacones, las larvas… todos comen alimento vivo y desde que lo implementamos no nos ha faltado la moina.

Es sencillo el proceso que describe Hurtado: se hace un inóculo del alga llamada clorela en un estanque fertilizado. En cuatro días alcanza el alga una concentración adecuada, se siembra la moina, que en un período igual de tiempo ya esta lista para la cosecha. Tres días después puede ya volverse a montar el proceso en el mismo estanque.

UNA CUESTION ENTRE LAS AGUILAS Y LOS CONEJOS
Cuando la cucharada de papilla, formada por millares de individuos de la microscópica moina, cae en el agua, los pequeñuelos manjuaríes se agitan y al rato se les observa mover las mandíbulas, indicando más claro que un letrero al pie de una foto que están masticando algo suficiente, aunque el imperfecto ojo humano sólo aprecie una ligera, punteada turbidez en el agua de la pecera.

-En el área de producción de alimento vivo tenemos 20 estanques de tres metros cúbicos, para la reproducción de la moina, y a la vez ahí tambien sacamos larvas de mosquitos y de moscas que igualmente forman parte de la dieta de los animales.

Tres estanques de reproductores, seis estanques más para el crecimiento de los peces, 40 estanques de 1m2 de espejo de agua y 28 peceras con todos sus sistemas de aireación y un área que es para el estudio de reptiles, integran asimismo la infraestructura básica de la Estación Hidrobiológica de la Ciénaga de Zapata. En el laboratorio se analizan concentraciones de clorela y se examinan los peces enfermos. Cuentan con una pequeña estación meteorológica y equipos para hidroquímica, cosa muy elemental en acuicultura.

Una colección biológica de animales conservados con fines de educación ambiental y estudio. Una vez a la semana se reunen para debatir sobre algún tema técnico: patología, anatomía de los peces, cultivo del alimento vivo. Con fines didácticos filmaron asimismo un video donde aparece todo el proceso, desde la captura del reproductor hasta el crecimiento de la larva y el alevín.

Desde los estanques de reproductores se llevan las larvas a la nave de precría después de la eclosión, aunque a veces se traen los huevos y se incuban en esta instalación. Aquí es donde se da crecimiento a los alevines, que cuenta con peceras y estanques hechos con tejas de canalón. Hay más de 1000 alevines bajo los cuidades de la estación.

-Pensamos que deben liberarse entre 17 y 20 centimetros y posiblemente un poquito más fuera mejor. Demoran de 90 a 120 días (tres-cuatro meses) para alcanzarla. Está muy en dependencia de la comida y el espacio, pero la comida sobre todo, la comida es muy importante en estos animales. Comen mucho, y es uno de los problemas del cultivo de los carnívoros. Un animal de estos de 10 cm necesita diariamente alrededor de 8 a 10 peces de 1 a 2 cm. Es decir, que estamos hablando de siete mil-8000 peces para la dieta de la cría. Nosotros les estamos dando moina, larva de ranas, larva de mosquitos, e incluso el crecimiento es más lento, pero incluso nos es difícil conseguir la cantidad de comida que necesitan ellos.

-Porque que pasa, que no se liberan estos animales en el medio natural, porque en eso tenemos que tener cautela y es otra cosa a la que tenemos que llegar, porque hasta ahora se ha ido trabajando en esto, en dominar la tecnologia de la reproduccion, pero las reintroducciones llevan asimismo un estudio y hay una metodología establecida para eso. ¿Que cantidad de animales se puede realmente liberar en un acuatorio? ¿Como esta la cadena alimentaria en el lugar como para que se inserte en ella un depredador? De lo contrario se crea un problema. No puede haber más águilas que conejos.

-Hay poblaciones de manjuaríes buenas, importantes, en zonas no impactadas por actividad humana, en el centro de la Cienaga, en el río Hatiguanico… Hasta ahora no se ha detectado la entrada de contaminantes industriales al area. La pesca comercial no la efectúan en la zona occidental. Ya en la zona más antropizada, por ejemplo, los canales, el Plan arrocero, que ahí se realiza la acuicultura… bueno, el manjuarí que está por ahí si queda al campo.

-¿Que talla puede alcanzar?

-Bueno, mira, el problema de las tallas… Por ejemplo, cuando hemos hablado con alguna gente ya mayores que trabajaron aqui en la Cienaga toda la vida, y entonces hay muchos reportes de que si lo vieron de dos metros, que si lo vieron de 1.50 , realmente yo salí varias veces en busca de esos manjuarises grandes, esos manjuaríes y no… los he visto. El animal más grande que yo he visto aquí es de 1.20 m. No lo pesamos; te encuentras personas que hablan de cantidades de libras que no me atrevo ni a decirlas. Conversando el otro dia con un señor que trabajó por la laguna del Venero, donde estaba la base de pesca deportiva que hubo ahí y dice que él los vio, que incluso mató uno de 48 libras.

-¿Ellos son depredadores carnívoros activos?
-Es un cazador. En el contenido estomacal se pueden encontrar anfibios, peces, insectos, … Nosotros los alinmentamos con pescado en trozos, aunque se pueden adaptar a comer harinas; unas tortas enriquecidas con aceite de higado de tiburón y eso, pero los mejores resultados se obtienen con pescado y si es vivo mejor todavía.

OTRAS ESPECIES
Aunque el trabajo con el manjuarí ha llegado a ser prioritario, Hurtado y su equipo no pierden de vista a otras especies, como la biajaca criolla y la trucha. La estación ha trabajado con algunas especies de guajacones de los géneros Gambusia y Giraldinus. Entre sus proyectos se halla colaborar con otras instituciones en la caracterización de poblaciones de macabí de la Cienaga, y estudios sobre el manjuarí y la biajaca criolla en el río Hatiguanico. En cuanto a otras familias zoológicas, en la estación trabajan especialistas del Parque Nacional en el estudio de la jicotea y la iguana, dos especies en problemas.

-Nos interesa asimismo el Ciprinodon variagatus, una especie de pez pequeño que lo mismo puedes encontrarlo en el mar, en aguas de 40/00 de salinidad, que en cero salinidad. Es una especie autóctona en la que se puede pensar para su posible introducción en la acuarofilia. Otra especie de interes para el mismo propósito es el Cubanictis cubensis, una de las pertenecientes al grupo de los guajacones. Hay quien le llama "el neón cubano" por su bella coloración.

-Puedo decir que hay muchas cosas por hacer para realmente conocer la fauna acuática local. Sabemos que en este momento el medio acuático del área está siendo impactado por una especie ajena, el claria, pero realmente hasta dónde, en qué magnitud, a quién más ha impactado…, cómo se comportó una población tal de peces, cómo varió en el tiempo, todavía eso falta, pero para eso hay que seguir trabajando duro…

Queremos llegar a conocer exactamente cual es la ictiofauna que habita en la Cienaga de Zapata y cual es la relación interespecífica que hay; abundancia, estado de las poblaciones, su estructura poblacional, incluso cómo se comporta la ictiofauna en epoca de seca en los diferentes lugares.

Perteneciente al sector de la Agricultura, esta estación hidrobiológica en la Ciénaga de Zapata cuenta con un administrativo, un técnico, cuatro obreros y tres custodios. Aspiran a ampliar su plantilla técnica y Hurtado señala: " Tenemos las puertas abiertas a todo el que quiera venir a trabajar". Ahora han delimitado un área de trabajo en el interior de la ciénaga, a unos ocho kilómetros de la estación, donde el contacto más inmediato con la vida silvestre abre la posibilidad de trabajar sobre manglares, vegetación acuática, cocodrilos….

-En los foros de Ciencia y Técnica, en los congresos forestales y los simposios de Humedales que tienen por sede la Ciénaga de Zapata, siempre que vemos la posibilidad de expresar la problemática de nuestro medio acuático lo hacemos, y siempre que podemos nos acercamos a conversar con otras personas, con decisores, y les planteamos nuestras preocupaciones.

-El trabajo en la Cienaga es duro. Las condiciones son… mucho mosquito, mucho jején, llegar a los lugares a veces es difícil. Pero nosotros estamos muy esperanzados. En la medida que vayamos desarrollando las infraestructuras, es decir, que se incorpore más personal a trabajar. Tenemos pensado insertar estudiantes que vengan para aca a hacer tesis. No solamente nacionales, sino extranjeros tambien. Estudiantes que vengan a hacer sus practicas, pasantías, etc. Esa es la idea de insertar muchachos nuevos con deseos de trabajar, llenos de ilusiones y de amor por la verdadera vida silvestre.

1 comentario:

Nautica dijo...

Muy buenooo!!!!!!